La Fundación Lelio y Lisli Basso – ONLUS es un centro internacional de documentación e investigación, de formación y promoción cultural de la sociedad contemporánea entre los más prestigiosos.
Nace en Roma en 1973 a partir de la fusión de la extraordinaria biblioteca de Lelio Basso con el Instituto para el estudio de la sociedad contemporánea (1969), y ha sido erigida en Ente moral con el decreto del Presidente de la República italiana en el mes de junio de 1974.
En 2005 se unificó con la Fundación Internacional Lelio Basso (1976), integrando en sus actividades la vocación global a la promoción de los derechos humanos y los derechos de los pueblos.

Lugar de referencia para distintas generaciones de estudiosos, personalidades políticas e intelectuales, su misión es promover las culturas de las democracias y de los derechos, del medioambiente y de los bienes comunes, de la equidad y de la diversidad, de los derechos humanos, de los pueblos y de las personas.

El marco de sus intereses científicos y culturales es el interdisciplinar de las Humanities: de la historia al derecho, de la antropologia a la filosofía, de la economía a la sociología, hasta incluir las interacciones con la dimensión técnico-científica en los sectores de la bioética, del medioambiente, de los recursos energético y de las tecnologías digitales.

La Fundación ofrece bienes y servicios de interés público a nivel local, nacional e internacional; participa y promueve el debate contemporáneo organizando iniciativas de investigación, formación y comunicación por medio de proyectos, convenios, seminarios, cursos, escuelas, presentación de libros, exposiciones, publicación y servicios en formatos tradicionales y digitales.

Su Biblioteca y su Archivo histórico conservan y actualizan un amplio patrimonio bibliográfico y documental y representan un punto de referencia reconocido para la profundización de los procesos de transformación del mundo contemporáneo, con referencia especial al desarrollo de la democracia y de los movimientos de masa.

La Fundación promueve iniciativas permanentes como el Observatorio sobre el respeto de los derechos fundamentales en Europa y el Tribunal Permanente de los Pueblos.